Regresar al Inicio

Paul Allen y su número 36

Staff e-Vector
703 vistas
Staff e-Vector
703 vistas

Dicen que tocaba la guitarra “casi” como Jimi Hendrix, Paul Allen, cofundador de Microsoft fue dueño de sociedades de inversión, inmobiliarias y equipos deportivos; esto y más fueron lecciones de inversión que dejó este millonario, quien falleció el 15 de octubre.

Los especialistas que han analizado su estrategia de inversión afirman que Paul Allen se lo debe todo al 36. Sí, ese el porcentaje de acciones de Microsoft que suscribió cuando junto con Bill Gates fundaron la compañía informática.

El capital restante de acciones se quedó en manos de Gates, con quien más adelante tuvo algunas situaciones que los llevó a distanciarse, pero no en los negocios, porque Allen siempre participó en la empresa hasta su muerte, aunque fuera sólo con una inversión del dos por ciento.

Al dar a conocer su deceso, Microsoft dijo llorar a su jefe, mentor y amigo cuyos 65 años fueron demasiados cortos.

Cuando Microsoft salió a bolsa, Allen vendió el famoso 36 por ciento de acciones, lo que ayudó a que su capital diera un brinco y también saltó en la lista de Forbes, para hacerse dueño de sociedades de inversión, inmobiliarias, los clubes deportivos Seahawks de Seattler y Trail Blazers.

Pero Allen jugó muy bien con su número de la suerte, el 36, porque una versión muy conocida apunta a que Gates intentó comprarle esa participación a cinco dólares cada una de las acciones, pero se negó porque no estaba dispuesto a vender por menos de 10 dólares, y como Gates no aceptó entonces Allen mantuvo intacta su inversión.

La decisión de Allen de no vender sus acciones fue su seguro de vida porque cuando Microsoft debutó en la bolsa en 1986 lo hizo a un precio de arranque de 21 dólares por acción, que era más del doble de lo que le había pedido a Gates por su 36 por ciento.

El debut de Microsoft en el mercado de valores estadounidense fue exitoso porque ese día subió un 33 por ciento y cerró a un precio de 28 dólares por acción. Fue entonces que el cofundador de la compañía informática vendió sus acciones y ganó 175 millones de dólares, conservando el 28 por ciento del capital.

Sin duda una gran lección para cualquier inversionista que busca triunfar en los mercados.

Aunque las complicaciones de salud lo acompañaron en sus últimos años, el 1 de octubre, informó que comenzó un tratamiento para el linfoma no Hodgkin, misma enfermedad de la que se recuperó en 2009.

A pesar de sus inconsistencias en los negocios, Gates reconoció en Allen su contribución a la compañía porque en algún momento dijo que la computadora personal no hubiera existido sin él.

A continuación las 3 lecciones que nos dejó Paul Allen para invertir:

1. Piensa en la comunidad.
En sus últimos 20 años, el también guitarrista, fue uno de los millonarios de Estados Unidos que más donó a organizaciones sociales; se estima que más dos mil millones de dólares se destinaron a beneficiar mil 500 agrupaciones de la sociedad civil, para una amplia variedad de causas, una de ellas la creación del Instituto Allen por la Ciencia del Cerebro, el Instituto para la Inteligencia Artificial, y el Instituto de Ciencias Celular.

La fortuna de Allen fue estimada por Forbes en 21 mil 700 millones de dólares.

2. Diversifica.
Esta regla de oro, de la que tanto hemos comentado, estuvo presente en las inversiones Paul Allen y si a él le funcionó tiene que decirnos algo.

Con su experimentada visión de inversionista creó junto con su hermana Jody el fondo de capital de riesgo, Vulcan, que supervisa sus iniciativas empresariales.

3. Gozan de prestigio
Los inversionista se sienten atraídos por las acciones de las tecnológicas porque no paran de otorgar dividendos; por ejemplo, en 2014, las que premiaron a sus accionistas con este beneficio fueron Apple, IBM, Cisco y Qualcomm.

Por eso, mientras más pronto comiences a invertir más rápidamente verás los resultados; eso es una constante en una gran parte de los hombres más ricos del mundo, ahí tenemos de ejemplo a Carlos Slim, el mexicano más rico del país y quien llegó a ser el más rico del mundo.

Para aspirar a invertir como los grandes hay que conocer cómo lo lograron y si ellos pueden, no hay nada que impida repetir su historia si te preparas con educación financiera.

¿Cuál es tu número de la suerte?

Fuente: Expansión, Xataka, Cinco Días, Seattlepi

Compartir

Suscríbete a nuestro newsletter y recibe el mejor contenido financiero

Suscríbete a nuestro newsletter y recibe el mejor contenido financiero