Hay un creciente movimiento internacional impulsado por inversionistas que construyen portafolios congruentes con sus valores o principios sobre el planeta, agua potable limpia, cielos despejados, ríos y lagos no contaminados, tierra de cultivo saludable y bosques abundantes; es decir son inversionistas responsables.
Este tipo de inversión se asocia a los temas de Medio Ambiente, Social y Gobernanza (ESG, Enviromental, Social and Gobernance), los cuales constituyen tres atributos para clasificar una inversión.
Esta tendencia está ganando cada vez más terreno en el mundo de las finanzas, tal como lo demuestran los números de la Alianza Global de Inversión sostenible que reportó para 2014 un monto de 21 mil millones de dólares en activos en fondos de inversión socialmente responsables.
La cifra significó un crecimiento de 61 por ciento en comparación a dos años atrás.
Pero quiénes son los que se inclinan por esta tendencia, la respuesta no es una sorpresa porque son los jóvenes, los llamados millennials y las mujeres.
Otro dato revelador es el resultado de la encuesta de la empresa State Street, que aplicó a un grupo de administradores de fondos donde identificó que el 76 por ciento de los entrevistados prefería las inversiones responsables en comparación a los fondos tradicionales.
Estos números deben ser tomados en cuenta al momento de elegir la empresas para ser dueño o comprar acciones, a través de la Bolsa Mexicana de Valores. Se estima que en los próximos cinco a 10 años, el 70 por ciento de los portafolios de inversión van a incorporar estos criterios.
El caso de Volkswagen que manipuló datos para que los autos a diesel pasarán las pruebas de emisiones contaminantes ha movido conciencias y por eso el 57 por ciento de los inversionistas da importancia a las operaciones éticas de empresa y que reflejen valores. Incluso ven posible que factores asociados a la responsabilidad social o de ESG pueden bajar los riesgos de escándalos corporativos como los más sonados de Uber y de United Airlines.
Los mercados emergentes como México se ha sumado a esta tendencia, la firma Ecovalores estima que un 20 por ciento de la inversión de los fondos socialmente responsables se va a dirigir a China y Rusia, pero entre un 3 y 6 por ciento podría destinarse a México y el resto de América Latina.
Fuente: Banco Ve por Más
