En agosto de 2019, Jovani Maldonado, de 15 años, salió expulsado de la camioneta en la que viajaba con su padre luego de ser impactados por un Tesla Model 3 que viajaba a unos 96 kilómetros por hora en la función Autopilot.
Jovani murió en el lugar, justamente a 6 kilómetros de la fábrica principal de autos de Tesla, en California.
A dos años de ese evento, el Gobierno de Estados Unidos anunció que mantiene abierta una investigación sobre Tesla, no solo por éste, si por otros 10 choques identificados por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés).
La NHTSA también dijo que estaba revisando 23 accidentes en los que el piloto automático pudo haber estado involucrado.
De acuerdo a los datos oficiales, esos accidentes dejaron 17 personas heridas, además de la muerte de Jovani.
El accidente del joven quedó documentado en un video de seis segundos que captó el Tesla y los datos que registró muestran que ni Autopilot ni el conductor bajaron la velocidad del vehículo sino hasta una fracción de segundo antes del impacto.
Sin embargo, también mostró que Jovani, quien iba en el asiento del copiloto, no tenía puesto el cinturón de seguridad.
Desde que se introdujo el sistema hace siete años, Tesla ha insistido en que la función de piloto automático no es un sistema autónomo como algunos conductores lo han tratado.
Autopilot es un Sistema avanzado de asistencia al conductor y la compañía advierte a los usuarios que deben permanecer listos para tomar el control del vehículo en todo momento.
Aún así, los detractores del sistema aseguran que su preocupación es que el nombre de “piloto automático” lleva a muchos usuarios a confiar demasiado en esa función.
De acuerdo con Forbes, en 2020 un tribunal alemán determinó que llamar al sistema Autopilot era engañoso para los consumidores y prohibió a Tesla usar tanto ese término como Full Self Driving para los vehículos vendidos en ese mercado.
“Tesla ha tratado a sus clientes como conejillos de indias y ha desplegado una tecnología defectuosa que puede matar a las personas con la falsa promesa de que es un piloto automático”, dijo Jamie Court, presidente de Consumer Watchdog, un grupo de defensa de la seguridad con sede en Los Ángeles, en un comunicado.
Un reportaje de The New York Times reveló que desde 2016, al menos tres conductores de Tesla han muerto en accidentes en los que Autopilot no detectó obstáculos en el camino.
En dos ocasiones, el sistema no frenó cuando unos semirremolques cruzaron la autopista. En la tercera, no reconoció una barrera de concreto.
Luego del anuncio de la investigación, las acciones de Tesla cayeron 5%.