Si buscas una buena administración de tu dinero no hay duda que debes apoyarte en la planeación financiera, que no debe ser complicada sino simple y práctica.
La realidad es que pocas personas elaboran un plan para su vida financiera y las que lo tienen no lo cumplen al pie de la letra.
Te retamos a que le preguntes a tus compañeros de oficina, tus amigos y familiares si creen que es importante llevar una planeación financiera y es posible que coincidan que sí lo es; pero diferentes sondeos de opinión reflejan lo contrario, por ejemplo, un reciente estudio de Northwestern Mutual demostró que un tercio de la población estadounidense no tiene planificación financiera. De los que sí lo hacen, un 58 por ciento piensa que necesita ayuda para mejorarla o ajustarla. Además, un 67 por ciento de los participantes dicen que ahorran, pero el 54 por ciento tiene deudas iguales o mayores a sus ahorros.
Otra muestra de lo que estamos hablando es que de acuerdo a Forbes el 69 por ciento de la población tiene cuentas de ahorros con menos de mil dólares y 34 por ciento de ellas no tiene nada.
Ambos estudios demuestran la falta de planificación financiera de las personas. Pero no creas que esta herramienta te va servir como una bola mágica que con frotarla te va a decir lo que tienes qué hacer con el dinero, sino que te ayudará a tener seguridad sobre un consumo futuro y cierto control sobre tu patrimonio.
Por eso es importante que conozcas estas tres claves sobre la planificación financiera que harán la diferencia entre quedarte de un lado de la cancha desfavorable y pasar a otro que sí te favorece:
1. Define objetivos. Si no das este paso en tu proceso de planificación financiera estás literalmente sin rumbo. Pero no te estreses pensando en un objetivo como el de Apple o Google porque no eres una mega empresa, eres una persona normal y por eso deben estar de acuerdo a tu realidad y capacidad. En la medida que pasa el tiempo ajustarás tus objetivos a tus nuevas realidades y en función de cómo se desarrolla tu vida.
2. Define un rango de tiempo para lograr lo que te propones. Esta parte del proceso requiere un poco de cautela, porque en ocasiones nos gana la emoción y nos ponemos fechas irreales, fuera de lógica y que te puede llevar a la frustración.
3. La principal herramienta para administrar tu dinero es un presupuesto porque de él dependerá más del 50 por ciento del éxito de tu planificación ya que será tu guía cuando tengas que tomar decisiones y como punto de referencia para evaluar tus logros financieros.
Fuente: Finanzas y Proyectos, Finect, Blog de Juan Marín Pozo
