Cuando parecía que la crisis sanitaria por el Covid19 estaba controlada, llegó la tercera ola y con ella, de nuevo las restricciones.
Y es que además, ahora hay que sumarle la peligrosa variante Delta, la cual está generando serias complicaciones.
Por esa razón, varios restaurantes de comida rápida, entre ellos McDonald’s, analizan cerrar sus espacios para comer y dejar solo la opción para llevar.
A principios del año pasado, McDonald’s Corp. había cerrado temporalmente los salones interiores en casi todos sus restaurantes en los Estados Unidos y apenas en agosto de este año reabrió más del 75 % el mes pasado.
La cadena de comida rápida estaba optimista en que para principios de septiembre
podría abrir el 100 por ciento de sus restaurantes.
Pero todo indica que no será así.
De acuerdo con Reuters, hace unos días McDonald’s anunció a los franquiciados sobre la posibilidad de volver a cerrar las áreas interiores de los restaurantes debido a la variante Delta.
Tan solo en Estados Unidos, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades detallan que esta variante y sus diferentes subvariantes estuvieron detrás del 93 % de los casos durante las dos últimas semanas de julio.
Y en México la situación no pinta mejor.
En una entrevista para El Financiero, la jefa del Laboratorio de Genética Molecular de la UNAM Laurie Ann Ximénez-Fyvie, aseguró que el tercer repunte de contagios de Covid19 en México está directamente relacionado con la variante Delta de esta enfermedad.
Por eso, en el comunicado que McDonald´s envió a los dueños de las franquicias señaló que la firma buscaba “más seguridad para el personal”.
Aún con estos inconvenientes, el poderío de la marca McDonalds no ha dejado de avanzar.
A finales del 2020, el número de sucursales superaró el límite de las 39 mil. Esto supone un aumento de más de 6 mil en 10 años.
