Durante esta crisis sanitaria, la tecnología financiera ha sido el gran aliado para mantener la economía “funcionando” y salir adelante. Y las mujeres han sido parte fundamental de esta revolución industrial 4.0.
Tan solo el año pasado el uso de alternativas digitales por parte de las mexicanas para gestionar su vida financiera aumentó 18% tan solo en el 2020, de acuerdo con datos de la fintech Bnext.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), reveló que tan solo la tenencia de una cuenta de ahorro por parte de las mexicanas pasó de 19% al 42% en los últimos seis años.
Esta situación les ha permitido aumentar su participación en la inversión o el emprendimiento.
El PNUD detalla que en particular, la inclusión y salud financieras de las mujeres pueden ser componentes fundamentales para avanzar hacia la igualdad de género, en virtud de que incrementan sus ingresos, su poder adquisitivo y su calidad de vida.
Además, de acuerdo con datos del Banco Mundial, la eliminación de la brecha de género económica podría generar 172 mil millones de dólares en riqueza de capital humano.
El diagnóstico de la ONU también detalla que las mujeres suelen gastar mayor parte de sus ingresos en salud y educación, para los miembros de su familia y tienden a ahorrar más ante contingencias.
De ahí, la importancia de su inclusión financiera.
Pero parece que vamos por buen camino, pues de acuerdo con las cifras referidas en el PNUD, durante los últimos 10 años, el porcentaje de mujeres que hicieron uso de tecnología móvil para ahorrar o invertir su dinero pasó del 4 por ciento al 11%.
Además, dentro de los primeros seis meses del 2020, en México se publicaron cinco regulaciones en materia de inclusión financiera encaminadas a fomentar la adopción y promoción de las cuentas de expediente simplificado, así como su apertura remota (onboarding digital), y a la implementación de las finanzas abiertas (open finance).
También la brecha de género respecto al acceso de las mujeres a productos financieros básicos se redujo en 5%, según datos del Panorama Anual de Inclusión Financiera del Gobierno de la República.
Este documento también revela que la tenencia de productos y servicios financieros ha mejorado para las mujeres respecto a 2018.
Detalla que las mujeres tienen 4.9% más cuentas de captación y 6.3% más tarjetas de débito, que los hombres.
También en las entidades de ahorro y crédito popular, el porcentaje de clientes y socios continuó favoreciendo a las mujeres.
Asimismo, se mostró que las mujeres con relación a los hombres, utilizaron menos su tarjeta de crédito.
El confinamiento al que nos orilló la crisis sanitaria también fue un detonante para que las mujeres tuvieran más incursión en las finanzas digitales.
Ahora, el 13% de las mexicanas tiene la opción de pagar en línea los servicios básicos como agua, luz e internet.
La tecnología es un motor de cambio económico que ha sido gran aliado en la crisis sanitaria, pero al incluir la visión de género se puede potenciar los beneficios que esta nos brinda.