Existen varias formas de aplicar la inversión con enfoque de género, en esta ocasión te contaremos sobre los bonos de género y su introducción en América Latina.
Primero, una definición. Los bonos de género son un producto de inversión que funcionan bajo la misma regulación financiera y de mercados de capitales que un bono tradicional, sólo que estos persiguen un objetivo distinto.
Su intención es facilitar el acceso de las mujeres al mundo laboral, a posiciones de liderazgo o a financiamiento.
Estos bonos sólo los pueden utilizar compañías que cumplan cualquiera de lo siguiente: que sean dirigidas por mujeres, que ofrezcan productos o servicios para ellas o que estén comprometidos con la equidad de género.
Darle mayor poder a las mujeres es uno de los principales “Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030”. De hecho, el quinto punto habla sobre la igualdad de género. La visión de la ONU más la lucha de las mujeres ha puesto este tema en el centro de la agenda mundial.
Con un mayor reconocimiento del enfoque de género y su aplicación en diversos espacios, floreció un mercado de activos para quienes están comprometidos con la paridad.
Los bonos de género fueron lanzados por entidades financieras y corporaciones para conseguir fondos que se traduzcan en iniciativas que promuevan la igualdad de género y el apoyo a la mujer empresaria.
Un ejemplo de su aplicación es lo que hizo el Imperial Bank of Commerce (IBC). Con una operación por 769 millones de dólares, impulsó préstamos del banco para clientes que tuvieran representación femenina de al menos 30% entre su alta dirección o en el consejo de administración. O qué tal la apuesta del Banco Garanti en Turquía (filial de BBVA) que emitió bonos por 75 millones de dólares para financiar empresas lideradas por mujeres.
En América Latina esto es algo nuevo, y en Panamá este mercado acaba de estrenarse. Banistmo (filial de Bancolombia) hizo una emisión de 50 millones de dólares. BID Invest, el banco del sector privado de Grupo BID, estructuró la operación y adquirió los bonos. Este proyecto se implementó para impulsar el Programa Impulsa de Banistmo, que apoya a medianas y pequeñas empresas lideradas por mujeres.
Esta emisión es muy significativa ya que se trata del primer esfuerzo formal en América Latina en impulsar exclusivamente bonos de género.
Anteriormente en la región se impulsaron bonos sociales, que dentro de sus objetivos están la equidad de género. Estos han tenido lugar en Colombia (Bancoldex), Chile (BancoEstado y Caja Los Héroes), México (Nacional Financiera) y, recientemente, en Perú (Banco Pichincha). Ahora que los bonos de género ya se estrenaron, veremos si otros países latinos lo replican.