Lo que aprendemos de pequeños nunca se olvida, y eso también aplica para el ahorro. Por eso te dejamos algunos consejos sobre cómo educar financieramente a tus hijos; ten la seguridad de que les servirá para toda la vida.
01.- Lo más básico: ¿qué es el ahorro?
Primero que nada los pequeños tienen que entender qué es el ahorro, porque si desde temprana edad entienden algo que no es, en el futuro será más difícil cambiar el chip. Ahorrar no significa guardar lo que sobra… ahorrar significa guardar una cantidad fija de tus ingresos (ya sea la mesada o el domingo), con un fin específico.
02.- Y ahora, ¿cómo ahorro?
En primera instancia es importante que los pequeños sepan para qué ahorran, puede ser un juguete, una ida al cine, o un videojuego… él niño lo decidirá. Luego hay que determinar si se trata de un ahorro a corto, mediano o largo plazo.
Finalmente, ya con un objetivo claro, establecer el tiempo que le tomará llegar a la meta. Así sabrá cuál es el monto diario, semanal o mensual que debe aportar a sus ahorros.
Para enseñarle a diferenciar el corto, mediano o largo plazo puedes conseguir una alcancía con divisiones, o de plano, tres distintas.
03.- Hazlo divertido: dale incentivos e ideas
Es muy buena idea darle estímulos para que ahorren. Por ejemplo, si ahorro 50 pesos en el tiempo acordado, darle otros 50 pesos para su alcancía.
También déjalo ser creativo y hacer sus propias fórmulas, por ejemplo, si prefieren ahorrar el dinero que le das para ir a la escuela, pueden prepararse su lunch desde casa. O la más común, trabajar en las labores del hogar para obtener más ingresos.
La idea es que ellos mismos piensen en alternativas que los lleven más rápido a su meta.
04.- Enseña con el ejemplo
Los niños aprenden con el ejemplo, así que puedes compartir con ellos el camino del ahorro. Cuéntale tus propias estrategias: si vas a comprar un producto diles cuál es el precio y qué tiempo le tomará a la familia conseguirlo. Con esto puedes lograr dos cosas, la primera, que tu hijo aprenda a valorar el dinero, y la segunda, que cuide todo lo que se compre con él.
05.- No todo cabe en una alcancía
Cuando los pequeños ya dominen lo más básico del ahorro, es momento de contarle sobre las instituciones financieras, sus productos y servicios.
Que los pequeños entiendan que una cuenta de ahorro en un banco no es ‘algo cool’, sino que tiene una función: dar la confianza de que tu dinero está seguro. Y claro, nada es gratis, es importante que entiendan que los servicios de instituciones financiera pueden tener altos costos monetarios.
La educación financiera es una parte importantísima en la formación de tus hijos, no la dejes de lado. Tener bases claras y saber cómo ahorrar desde pequeños se convierte en un hábito que les hará su vida más fácil.