Piénsalo: hace no mucho tiempo tener una línea fija en casa era lo más normal del mundo. Se trataba de un servicio más, junto con el agua y la luz. Pensar que en tan poco tiempo tener teléfono terrestre en casa se volvería anticuado era inimaginable.
Pero sucedió. Y sucedió tan rápido que apenas nos dimos cuenta. Bueno, pues expertos en movilidad creen que pronto lo mismo sucederá con los automóviles. Y no es que vayamos a dejar de movernos en automóviles, sino que cada vez más personas optarán por no comprar uno.
¿Por qué? Porque las alternativas como el car-sharing y el ride-sharing se volverán progresivamente vez más convenientes. Al menos, eso es lo que dicen personajes como John Zimmer, co-fundador de Lyft, el principal competidor de Uber en Estados Unidos.
Según Zimmer, en menos de dos décadas, el automóvil propio será una cosa del pasado – al menos en las grandes ciudades.
“Para 2025, poseer un auto será igual que tener un DVD”, predijo en un artículo titulado “La Tercera Revolución del Transporte”.
En la Collision Conference, celebrada este mayo, expertos de la industria coincidieron en que la tendencia es que los consumidores se decidirán por los servicios basados en suscripciones, como Uber y Lyft.
“Tu teléfono será tu auto”, dijo Andre Haddad, CEO de Turo, una compañía de vehículos compartidos que permite que los usuarios arrienden sus autos a otros.
Según reportó Forbes, Haddad dijo que si bien las ventas de automóviles nunca habían sido mayores a nivel global, la gente se está dando cuenta de que ser propietario de un vehículo se está volviendo cada vez más inconveniente debido a los pagos, seguros y estacionamiento. Además, dijo que cada vez más personas se dan cuenta de que pueden compartir su auto cuando no lo están usando, o arrendarlo para cubrir altos costos de su propiedad.
“Considera la velocidad con la que la gente cambió de los mapas físicos a los digitales, del correo físico al email, de la televisión por señal a los servicios on-demand.
Las que eran costumbres longevas fueron reemplazadas rápidamente por herramientas digitales que hicieron las cosas más fáciles, más convenientes y simplemente mejores”, señala la gurú de la tecnología Kara Swisher en un artículo de The New York Times.
“Sencillamente, todo lo que pueda ser digitalizado será digitalizado”.