Ampliar el abanico a la hora de invertir te ayuda a minimizar los riesgos y aprovechar las oportunidades.
La regla de oro de las inversiones es diversificar, tal vez lo hayas escuchado mil veces, y sea la recomendación que todo asesor financiero te dirá porque tiene razón ya que es una apuesta que para muchos es segura.
Pero si crees que no te alcanza para diversificar piensa que hay instrumentos que en sí ya están diversificados, por ejemplo los fondos de inversión, que con mil pesos puedes entrar a uno de ellos y te ofrecerá diversificación.
Te compartimos algunas claves para que logres la diversificación correcta:
- Una diversificación excesiva es sinónimo de desconocimiento. Para cualquier inversionista, esta estrategia puede ser muy amplia pero es lo que la vuelve atractiva. Las posibilidades son inmensas al incorporar elementos como tipo de instrumentos por mercados; regiones o países; plazos; sectores o emisoras, es decir acciones.
- Sigue el consejo de la abuela y busca tener ladrillos y oro; ambos instrumentos han sido el resguardo de muchas generaciones. Tu diversificación puede llegar a ser muy detallada, por ejemplo podrías tener un centenario y buscar fondos de inversión que tengan oro en sus portafolios.Otra opción es invertir en un inmueble que puedas tocar e ir a ver o invertir en Fibras por medio de la Bolsa Mexicana de Valores.
- Una regla de oro es entender en qué estás poniendo tu dinero.
Si desconoces cómo invertir en oro evita salir corriendo a comprar cadenas a la joyería porque este metal precioso vale por su peso y en la joyería pagas también por el diseño.Sólo el 12 por ciento de los mexicanos sabe lo que es un fondo de inversión, de acuerdo a cifras oficiales, el riesgo de tomar una decisión incorrecta es muy grande. - La combinación balanceada puede ser la inversión de un portafolio 50 por ciento en la BMV y otro 50 por ciento en la bolsa de Estados Unidos, que puede ser el S&P 500.
Un reciente análisis reveló que en los últimos 10 y 5 años, la inversión en el mercado de valores estadounidense dio rendimientos de 228 por ciento y 144 por ciento, respectivamente; mientras que en México el resultado fue de 67 por ciento y 90 por ciento, para cada periodo.