Conoce algunas de las mejores estrategias prácticas para aumentar tus ahorros y alcanzar tus metas financieras rápido.
Ahorrar dinero puede parecer difícil, pero es un hábito esencial que todos debemos practicar. Es una inversión para tu tranquilidad y tu futuro, porque ahorrar un poquito es bueno, pero tener un guardadito para imprevistos es mejor.
Antes de entrar a los tips, recuerda que una parte clave (básica para ahorrar) es aprender a administrar tu dinero. Esto implica llevar un registro de los ingresos y gastos, establecer un presupuesto mensual y hacer un seguimiento de las finanzas personales.
Para empezar a mejorar tu capacidad de ahorrar, una buena práctica es comenzar a ahorrar un poco en tu día a día, ¿cómo? Evitando comer fuera, reduciendo el consumo de productos que no necesitas, como snacks o bebidas, y procurar comparar precios antes de realizar compras para aprovechar descuentos.
De esta manera te podrás dar cuenta que, si gastas diariamente $56 pesos en un starbucks y en vez de comprarlo, llevas tu café preparado, te ahorrarías $280 pesos a la semana y $1,120 pesos al mes.
Tips de ahorro
Una estrategia sencilla para ahorrar es establecer un presupuesto para tu semana, de acuerdo a tus gastos. De esta manera podrás priorizar tus gastos y reducir los que no son esenciales, y así también ahorrarás un poquito.
Ahorrar una parte de tus ingresos cada mes o cada quincena es complicado si eres una persona que le gusta gastar, pero con la ayuda de apartados dentro de tu cuenta bancaria puedes destinar lo que quieras ahorrar y al menos te ayudará a no disponer de él tan fácilmente.
Evita errores comunes
Para alcanzar tus metas financieras y que sea más fácil desarrollar el hábito de ahorro existen unos “errores” que te podrían impedir ahorrar dinero, cómo: gastar más de lo que ganas, acumular deudas, comprar sin comparar precios y salirte del presupuesto asignado.
Identifica cuántos de estos errores cometes a la semana e intenta corregirlos para ahorrar de manera efectiva. Algunas “reglas” que te pueden ayudar son: establecer límites para tus gastos en diferentes categorías, pensar dos veces antes de comprar algo, utilizar efectivo en vez de tarjetas y limitar el consumo excesivo.
Al seguir estas reglas, podrás mantener tus finanzas en orden y evitar desviarte del presupuesto establecido.