La mayoría de los sectores agroalimentarios es controlado por un puñado de empresas, lo que ha generado problemas de suministro, precios, innovación y daños al medio ambiente.
¿Alguna vez te has preguntado quién está detrás de la comida que ingieres todos los días? Aunque el debate sobre la industria suele girar en torno al apoyo a los productores locales y seguridad alimentaria, lo cierto es que existe un grupo muy reducido de empresas que controlan el mercado.
En los últimos tiempos, similar a lo que ha pasado en otras industrias, el sector agroalimentario se ha ido consolidando. Hace 25 años alrededor de 10 compañías representaban el 40 por ciento del mercado de semillas, mientras que hoy en día está en las manos de 2 entidades.
Este tipo de datos se pueden ver en el último reporte realizado por Grupo ETC, una organización que se dedica a la conservación y promoción de la diversidad cultural y ecológica y los derechos humanos.
En el informe titulado Los Barones de la Alimentación los analistas advierten que estos oligopolios están detrás de los problemas que enfrenta el sector. Por ejemplo, durante los años de recuperación de la pandemia de COVID-19 un pequeño grupo de empresas se aprovechó para tomar control de las cadenas de suministro vulnerando los derechos de campesinos.
Esto ocasionó que mil millones de personas en el planeta pasaran hambre mientras que los “barones” llevaron sus utilidades a niveles récord.
Concentración de mercado y cambio climático
Otro de los problemas que han generado los oligopolios es que el actual sistema internacional de producción de alimentos se ha vuelto insostenible.
De acuerdo con un estudio publicado en la revista Nature Food liderado por la Universidad de Illinois, el sector alimentario genera más de 17 mil 300 millones de toneladas métricas de CO2 cada año.
Alrededor del 57 por ciento de estas emisiones está vinculada a los alimentos de origen animal, sobre todo el vacuno. En ese sentido, el consumo actual de carne en el mundo no es sostenible y el mercado necesita cambiar de paradigma antes de que sea tarde.
Sin embargo, el control de la industria alimentaria por pocas empresas hace que el cambio sea difícil. La mala gestión medioambiental ha provocado desperdicio alimentario, pérdida de biodiversidad agrícola, uso de fertilizantes contaminantes y el incremento de gases de efecto invernadero, entre otros.
Como solución, los expertos recomiendan impulsar un uso más eficiente de los recursos, la construcción de infraestructuras no dañinas al ecosistema, mejorar el acceso a servicios básicos y la creación de empleos en el campo bien remunerados y con buenas prácticas laborales.
Del campo a la basura
Un informe realizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la organización británica sobre residuos WRAP señala que alrededor del 17 por ciento de la producción total de alimentos termina en la basura todos los años.
De acuerdo con cifras de 2019, las últimas disponibles, lo anterior equivale a 931 millones de toneladas de comida. La mayor parte de este desperdicio, el 61 por ciento, ocurre en los hogares. De ahí le sigue el servicio de alimentos, como restaurantes y hoteles, quienes son responsables del 26 por ciento del desperdicio. Finalmente, el 13 por ciento restante tiene que ver con los supermercados.
La ONU también advierte que esto no es un problema solo de los países ricos. Incluso en naciones que tienen a una gran parte de su población con hambre suelen desperdiciar alimento porque la gente compra más de lo que come.
Las 10 marcas de comida que controlan el mercado
- Nestlé
- PepsiCo
- Coca-Cola
- Unilever
- Danone
- General Mills
- Kellogg’s
- Mars
- Associated British Foods
- Mondelez
¿Cuáles son los sectores industriales agroalimentarios clave?
- Semillas.
- Agroquímicos.
- Genética del ganado.
- Fertilizantes sintéticos.
- Maquinaria agrícola.
- Productos farmacéuticos para animales.
- Comerciantes de productos básicos.
- Procesadores de alimentos.
- Corporaciones de la carne.
- Venta minorista de comestibles.
- Entrega de alimentos.
