El aguinaldo puede ser un salvavidas en tu cartera, un ticket directo a compras impulsivas o una herramienta para tu bienestar financiero, ¿cómo estás planeando administrarlo?
Ya casi es momento de recibir ese dinerito «extra» (y bien trabajado) que te salva de deudas, de intercambios, de regalos especiales, y que además te ayuda a fortalecer tus ahorros.
Claro que decimos fortalecer tus ahorros porque si diste clic en esta nota, al menos una parte de ti está interesada en ser responsable con sus finanzas.
Tan solo en unos días tendrás el aguinaldo en tu cuenta y lo que hagas con él, cómo lo repartes y a dónde lo destines puede hacer dos cosas: mejorar tus finanzas personales o complicarlas un poco ¿más?
¡No te preocupes! Te vamos a explicar de manera sencilla cómo puedes administrar tu aguinaldo para que no lo gastes libremente y lo utilices como una herramienta que mejore tu bienestar financiero.
Esto es muy importante porque si todas las personas en México supieran administrar su aguinaldo de una buena manera, existirían todavía menos personas con deudas y más personas felices.
Y es que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud Financiera (ENSAFI, 2023), un 36.8% de la población mexicana de 18 años y más, dijo tener deudas y de ellos el 49% la catalogó como “deuda moderada”.
Además, dentro del estudio se analizó que un 42.6% en mujeres y 31.9% de los hombres, han llegado a sentir tristeza por su situación financiera.
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¿Por dónde comenzar a administrar tu aguinaldo?
Antes de planear cómo gastar tu aguinaldo necesitas saber con cuánto vas a contar, a partir de ahí podemos repartir.
1. Calcula tu aguinaldo
Por ley en México, el aguinaldo corresponde al menos a 15 días de salario si has trabajado un año completo en la misma empresa.
Entonces divide tu salario mensual entre 30 para saber cuánto ganas por día y eso multiplícalo por 15 (o los días que te correspondan según tu contrato).
2. Define prioridades
No se trata de que tu dinero se esfume tan pronto lo recibas. Por eso es importante mantener un equilibrio entre disfrutar tu aguinaldo y fortalecer tu estabilidad financiera.
Para esto tienes que ubicar cuáles son tus prioridades y a partir de ahí asignar un porcentaje, para esto podemos utilizar también una regla muy conocida y efectiva: 50-30-20.
Por ejemplo, si mi prioridad son adelantar pagos o saldar deudas puedo destinar a ello de un 40-50%, después puedo destinar un 30% para mis ahorros, fondo de emergencia o inversión y dejar un 20% para gastos personales y/o regalos.
3. Establece gastos razonables
Una vez que tengas enlistadas tus prioridades, pasemos a la parte más divertida, o sea, los gastos. Pero aquí también es importante que establezcas un límite del que no puedas pasarte porque si no, terminarás necesitando de otro aguinaldo para saldar tu deuda.
El consejo que te podemos dar es que no dejes los regalos para el último porque los precios suben en esta temporada y te saldrá más costoso.
4. Piensa en el ahorro, inversión o tu fondo de emergencia
Recuerda que una de las partes más importantes en este camino hacia la libertad financiera es el ahorro, en todos sus sentidos.
El que hoy te preocupes por tu futuro financiero, te permitirá tener esa tranquilidad al momento de tu retiro y con todos los esfuerzos que haces durante el año, el aguinaldo al final puede ser un regalito extra para disfrutarse después.
Ya sea que destines una parte a tu cuenta de ahorro, decidas invertir (la favorita de muchos) o la destines a tu fondo de emergencia porque ¿quién sabe qué puede sucedernos el día de mañana?
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud Financiera (ENSAFI, 2023) “Poco o nada” de la población mexicana arriba de 18 años puede hacer frente a un gasto imprevisto. Esta es la señal que buscabas para empezar tu fondo de emergencia.
Tener claridad sobre tu alcance financiero es básico para empezar el año con estabilidad y tranquilidad económica. El aguinaldo puede ser tu aliado para saldar deudas, fortalecer tus ahorros, invertir en tu futuro y disfrutar (responsablemente) de las celebraciones decembrinas.
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