Si ya tomaste la decisión de poner tus ahorros en movimiento para sacarles rendimiento es importante tener claras estas ideas en el manejo de la inversión.
Lo importante al empezar a invertir es establecer nuestros objetivos y sobre todo, estar conscientes de lo qué estamos dispuestos a comprometer para lograr hacer la inversión.
También es muy importante tener en mente las opciones de portafolio, invertir en distintos lugares y de diferentes formas; así se minimiza el riesgo y hay un grado de blindaje ante eventualidades.
Por eso compartimos la guía que según InvestlQ, la herramienta de educación financiera de Schroders, se debe seguir para conseguir el ansiado rendimiento de una inversión en la bolsa.
1. Ahorrar no es lo mismo que invertir, aunque en ambos casos consiste en reservar el dinero para el futuro, los objetivos son distintos. Al ahorrar sólo se almacena el dinero y está al alcance para cuando se necesite; en cambio, al invertir se busca hacer crecer el patrimonio.
2. Riesgo y rentabilidad son las claves de una inversión, y la fórmula no es tan complicada si tomamos en cuenta que a más riesgo hay más probabilidad de obtener una alta rentabilidad.
3. Pensar en inversiones alternativas porque no todo es acciones y bonos en el mercado. Cada estrategia tiene características particulares que se deben estudiar a detalles antes de invertir en cualquiera de ellas.
4. Se puede entrar al mundo de la inversión en forma individual o con la guía de un asesor financiero. Lo recomendable es hacerlo de la mano de algún especialista que ayude a definir tus objetivos y perfil de inversión.
5. El riesgo siempre existirá en cualquier tipo de inversión, por lo tanto no es algo malo, lo que no es correcto es no tener claro el horizonte financiero.
Como mexicanos, domina el escepticismo en nuestra mente al momento de pensar en un rendimiento positivo y continuo de la inversión. En lo que pensamos es en volatilidad, lo cual sólo refleja que no se tiene el conocimiento del tema, porque la volatilidad representa la variación sobre el rendimiento esperado de la inversión.
Fuente: El Confidencial, Gestión