¿Qué hacer si en verdad tienes dinero de sobra? Ya cubriste tus gastos corrientes, ya cubriste tu seguro de gastos médicos, tu seguro de vida e incluso cuentas con un plan para el retiro que protege tu inversión de la inflación y que te ofrece un rendimiento garantizado.
El siguiente paso es la inversión. Entonces, ¿dónde puedo encontrar el mejor rendimiento que se ajuste a mi perfil de riesgo? Esta pregunta nos lleva al eterno dilema de si es mejor invertir en bienes raíces o en los mercados financieros, entiéndase acciones, bonos, etc.
Es común escuchar que el precio de los terrenos siempre tiende a subir, que es una inversión segura. Sin embargo, la crisis financiera del 2008 nos demostró qué tan equivocados estábamos. El desplome del precio de las viviendas estuvo al centro de la peor catástrofe económica desde la Gran Depresión.
Los mercados financieros, particularmente las acciones, tienen algo parecido con el comportamiento del valor de los terrenos. En el largo plazo, los principales índices accionarios tienden a crecer de manera sostenida. La diferencia fundamental respecto a los terrenos es que la inversión en bolsa te permite diversificar tu riesgo de mejor manera que la inversión en terrenos. Puedes escoger entre diferentes compañías, sectores e incluso, si se añaden instrumentos de renta fija al portafolio, tendrás un mayor margen de maniobra para definir el riesgo que deseas asumir.
En segunda instancia, está el tema de la liquidez. Dado que el mercado accionario es mucho más dinámico que el de bienes raíces, resulta mucho más fácil encontrar compradores para el activo que desees vender en caso de que necesites efectivo de manera relativamente urgente. No es lo mismo vender una acción de América Móvil que cuenta con un volumen de operación diaria de 2.5 millones de acciones a vender una casa, un terreno u otro activo fijo con condiciones muy particulares.